Más de 600.000 tucumanos se verán afectados hoy por el quite de colaboración que llevarán adelante los choferes de colectivos, que dejarán la provincia sin servicio de transporte público de pasajeros entre las 9 y las 11 de la mañana y, por la tarde, lo harán entre las 15 y las 17. La medida de fuerza es en reclamo por la demora en el pago de los sueldos del sector.
Desde la Unión de Tranviarios Automotor (UTA), el secretario general del sindicato, César González, confirmó que el quite de colaboración será "desde las 9 hasta las 11, y desde las 15 hasta las 17" y alcanzará a "todas" las líneas, "tanto urbanas, como metropolitanas y rurales".
En un contacto con la prensa, González advirtió ayer que "ellos (por los dueños de las líneas de colectivos) manifestaban que, con los fondos que venían de la Nación en agosto, se hacía efectivo el pago de las diferencias, y eso no ocurrió. Ya esperamos bastante y no tenemos ninguna respuesta favorable, así que comenzamos con esta medida para ver si nos escuchan".
¿Hasta cuándo se extenderá el reclamo de los choferes?A la espera de una solución, González adelantó que "si (los empresarios) nos llaman para una reunión o hacen efectivo el pago, la medida se levanta".
La metodología de la protesta, explicó el sindicalista, se llevará adelante durante la mañana con una asamblea de trabajadores, mientras que por la tarde "vamos a concentrar en el parque 9 de Julio".
Todavía es incierto qué sucederá mañana ya que González sostuvo que la situación "se evaluará" y recién se determinarán los pasos a seguir.
"Si las empresas no dan una respuesta a lo que estamos planteando, seguramente se va a ir a un paro de actividades en su totalidad", alertó el secretario general de la seccional local de la UTA.
Los empresarios adelantaron que no tienen los fondos suficientesLa otra cara de la moneda es representada por la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat), desde donde le aseguraron a LA GACETA que se buscarán la forma de evitar que la medida de fuerza se extienda en el tiempo, pero deslizaron que el problema de los costos en el sector llevó a un escenario crítico.
"Estuvimos en conversaciones y reuniones, pidiendo (a UTA) que esperen, porque hemos saldado los salarios con los aumentos incluidos, pero no estamos en condiciones económicas de afrontar el bono y la diferencia de abril y mayo", confirmó Jorge Berretta, directivo de la entidad.